Normalmente cuando hablamos de prestar atención a los cuidados y el mantenimiento de las puertas automáticas nos viene a la mente la temporada de verano, con el sol, las altas temperaturas, sobre todo teniendo en cuenta el clima que tenemos en Baleares, pero el invierno en Mallorca también puede ser perjudicial para nuestros automatismos si no les prestamos atención.
El frío afecta bastante a los motores hidráulicos. Los automatismos hidráulicos son más rápidos cuando hace calor y más lentos con el frío. Los motores funcionan con aceite en su interior y este aceite se vuelve más espeso con el frío. Como el motor necesita hacer más fuerza, su funcionamiento se ralentiza.
Las zonas húmedas también pueden perjudicar el motor del automatismo o los ejes de la puerta si es basculante o corredera, prestar atención a las juntas o a cualquier sitio por dónde se pueda filtrar agua y hacer pruebas con el mando a distancia puede salvarnos de más de un disgusto.